viernes, 25 de septiembre de 2009

En las Nubes


Es como estar en una fiesta o que haya mucho sol sobre ti: todo pasa tan rápido, sientes mareos, y parece ser que estás soñando. Todo es así mágico. Incluso, la misma palabra te dice un poco de mi segundo nombre. Yo busqué (o encontré) esa relación porque me siento ligada a ambas combinaciones de letras. Antes no me gustaba ese nombre, pero me has ayudado bastante a quererlo, a querer, a quererme, también. Y más o menos de esto se compone nuestra compañía: de aprender a trasnformarnos sólo por el hecho de jugar con lo que somos, y no porque esté algo en juego, porque jugamos sin miedo. Además, jugamos conociendo bien la palabra construcción. La aceptamos ya como parte de nosotros y parte de todo lo que compone al mundo. Esto puede sonar un poco aburrido, un poco insípido, un poco innecesario, o, como bien dirías tú: un poco nada. Pero tomémoslo como uno de los impulsos mágicos que sufre nuestro cuerpo de vez en cuando y al cual respondemos automáticamente, y que, finalmente, trae cambios y consecuencias, que a veces no nos gustan y otras veces, nos llenan (de una vez por todas) la vida.

1 comentario:

Unknown dijo...

Algún día señorita bella
algún día me privaran de verla
algún día se secaran las nubes
y poco a poco caerán las estrellas

digame señorina mía
cual frase según usté la mas falsa
que cuando me sea imposible decirle
decirle insistiré en gran causa

supongo que usté sabe quien le habla
soy su gentil señor romelio
que aunque uste crea que a veces
la lengua se me pasa
es simplemente que soy tan inmauro
cuando de mostrarme a uste se trata

yo la amo a uste julinda
y la amo con profundo amor
no me niegue con testadura siesta
no me dañe con el innoble bribon

y si así ute lo quiere
no me deje nunca de su cuerpo salir
que su piel me enseño a ser fragil
y brillar consigo juntos
juntos como el colibrí