jueves, 29 de abril de 2010

No hay más de Mí


La resignación es un suicidio cotidiado
Balzac



Dejaré de amar con pasión y locura, porque aprendí que no puedo derrochar mis lágrimas por el pasto siempre que me enamore.
No puedo seguir enamorándome y cayéndome en un pozo. No puedo permitirle eso a mi vida.
Hoy decido tener precaución con mis impulsos, hoy decido no tirarme al abismo, hoy decido parar de ser pura pasión.
Porque ya no puedo seguir extrañando un recuerdo, aunque hayas sido ayer, hoy ya debes ser un bellísimo (pero no más que eso) recuerdo.
No quiero estancarme en ti, aunque me gustaría poder esperarte, aunque me gustaría pensar, en que tal vez me pidas que empecemos de nuevo.
Pero, no, no, eso no va a pasar, y esperarlo, es sólo seguir con una falsa ilusión, y esa falsa ilusión es la que debo, con urgencia, convertir en recuerdo.
Me despido de ti ahora, porque prefiero que sea hoy, y no mañana, prefiero no esperar que tú vuelvas a decidir por los dos.

Por el paso de tu vida en la mía, estaré infinitamente agradecida, pero debo avanzar, y para avanzar, hay que superar.

No hay comentarios: